¿Te preguntas porque la báscula no se mueve aunque no te hayas perdido de ninguna sesión de ejercicio en el gimnasio? Mientras comes tu ensalada, te preguntas cuanta comida mas necesitas dejar de comer para tener ese cuerpo con el que sueñas. Antes de que te "castigues" con mas sesiones exhaustivas en el gimnasio, necesitas evaluar si es que tu trabajo no te esta saboteando tus mejores esfuerzos por estar delgado. Abajo están las 3 maneras principales en las que tu trabajo te esta engordando.
Pegado al escritorio
¿Tienes un trabajo que te mantiene pegado a un escritorio y que requiere que pases largas horas sentado y haciéndote sedentario? En estos días, la mayoría de los trabajos requieren que nos sentemos en nuestro escritorio por largas horas, y eso puede contribuir para que nuestra cintura se haga cada vez mas ancha. Así es que el remedio es el hacer un esfuerzo consciente de estirarse y caminar un poco en la oficina o casa. Recuerdate el ir al baño, a tomar agua, a platicar un poco con los colegas. Otra cosa que puedes hacer también es el estacionar tu coche un poco lejos de la oficina y usar las escaleras lo mas seguido posible. Estos hábitos ayudan bastante a no dejar que se acumule la grasa en tu panza.
Ataque de golosinas
Parecería que la oficina nos predispone a fallar porque todo el tiempo estamos rodeados y bombardeados con botanas y golosinas deliciosas pero altas en azúcar o grasa. Muchos compañeros de trabajo con buenas intenciones traen pasteles o galletas hechas en casa para compartir. Sin dejar de mencionar que también hay botanas gratis en la alacena. Desafortunadamente, la mayoría de estas golosinas gratuitas son muy dulces y proveen muchas calorías vacías. No te vas a sentir lleno hasta que te comas como una docena de estas golosinas dulces. Alimentos que contienen proteína, como huevos, pueden llenarte mejor que media docena de donas glaseadas. Así es que, ponte un limite de cuantas golosinas dulces puedes comer al día y evita otras botanas si te pasas de tu cuota. Tu colega va a entender si no comes una o dos de sus recién horneadas galletas con chocolate.
Eres mi sol
Si tu área de trabajo no tiene ventanas y tu llegas a tu trabajo antes de que el sol salga, entonces puede que te pierdas el poderoso y natural efecto quema grasa de el sol. Un estudio en el 2014 de la Universidad Northwestern encontró una relación entre la exposición al sol y el IMB (Índice Metabólico Basal). El estudio demostró que la luz brillante de el sol en las horas de la mañana parece tener un efecto adelgazante. La Luz ayuda a regular los ritmos de el cuerpo, los cuales a su vez regulan el balance y el gasto de energía. Los autores de este estudio sugieren entre 20 a 30 minutos de luz solar entre las 8 de la mañana y las 12 p.m. todos los días para evitar un aumento de peso. Así es que aquí esta otra buena razón para irse caminando al trabajo y salir al exterior a la hora de la comida.
Antes de que agregues mas ejercicio a tu semana ya de por si ocupada, o comas menos comida, ¿porque no te haces mas consiente de tus hábitos en tu trabajo?. Evitar esas golosinas gratis y el recordar el tomarte descansos constantes en el trabajo puede ser mas efectivo en impedir el que subas de peso.
Los estilos de vida llenos de actividades seguido llevan a que las experiencias con la comida no se disfruten. Recuerda la ultima vez que comiste frente a tu escritorio mientras contestabas algunos correos electrónicos. O corriendo de la mesa a la estufa, cuidando a tu familia durante una comida. No solo estas situaciones seguido nos llevan a escoger alimentos que no proporcionan los suficientes nutrientes, sino que también dejamos de aprovechar el rol que la comida tiene en nuestra felicidad.
La verdad es que la felicidad es una gran parte de la salud. El placer que obtenemos de la comida nos sirve mucho a celebrar, recordar, y aun relajarnos. El comer por alguna emoción seguido se critica de manera negativa, pero en realidad es una evolución - proceso base que proporciona una buena cantidad de neuro-quimicos diseñados a ayudarnos a sentir bien.
En un mundo en donde muchos de nosotros tenemos acceso a una abundancia de comida, el comer conscientemente y saborear nos ayuda a mantener un balance entre el placer momentáneo y verdaderamente nutrir nuestro cuerpo y mente.
Cuatro Pasos para Saborear
Considera estos cuatro pasos para encontrar un verdadero gozo al comer, apreciando el sabor y el como te hace sentir la comida, ya sea en la mesa de un amigo, en la comida rápida, o en un lujoso restaurante.
1. Espera a que te de hambre la mayoría de el tiempo. La comida sabe mejor cuando tenemos hambre. El hambre también es una señal de que es tiempo de comer. Solo asegúrate de no esperar demasiado tiempo. El dejar que nos de demasiada hambre nos predispone a tomar malas decisiones en nuestra selección de alimentos y a comer en exceso, y ninguno de estos se sienten bien a largo plazo.
2. Enfocate. El comer es una parte tan natural de nuestras vidas, que lo podemos hacer en piloto automático. Desafortunadamente las cosas mas fáciles usualmente reciben la menor atención. Seguido escogemos alimentos que no suplen nuestras necesidades. Considera los cinco sentidos - olfato, tacto, vista, sonido, y gusto - para aprovechar al máximo tu experiencia comiendo.
3. Piensa antes de comer. Pon por un lado las reglas de alimentación y piensa mejor en lo que sabe bueno y en lo que te hace sentir bien. Checa antes, durante, y después de una comida y confía en tu cuerpo.
4. Come intencionalmente. ¿Cual es tu intención? ¡Disfrutar, por supuesto! Solo recuerda el incluir sentirte bien ahora y después en tu definición de disfrutar.
Empieza apreciando el aroma y la apariencia de la comida mientras también reconoces todo lo que tomo para que la comida llegara a tu plato o a tu mano. Esta pausa antes de empezar a comer provoca anticipación, la cual, cuando finalmente tomas un bocado, puede ofrecerte una gran recompensa en cuanto al placer.
Come lentamente para experimentar la comida de una manera mas intensa y poder mas fácilmente notar cuando estés satisfecho. En lugar de forzarte a comer mas lento, o aun contar masticadas, el saborear tu comida automáticamente hace mas lento el proceso. No es algo que tenemos que hacer, sino es algo que queremos hacer. Y eso hace toda la diferencia.
